La saga de Juego de Tronos baja de velocidad en este capítulo que muestra a Ned Stark preparándose para la muerte y al resto de su familia corriendo por sus vidas o haciendo preparativos para ir a la guerra. El show realmente capta bien las emociones de los personajes, que se ven forzados a elegir caminos que normalmente no tomarían, solo para salvar sus vidas o su honor. También en la muralla los eventos continúan preparándose para un confrontación entre la guardia nocturna y los caminantes blancos, la cual definirá el destino de los 7 reinos.
Robb Stark comenzó a aprender lo que significa liderar un ejército y Jon Snow a aceptar que el mundo es mucho más sombrío y complicado de lo que jamás imaginó al enfrentar un horror que escapaba a su imaginación. Mientras tanto el Khal Drogo demostró porque es el mejor guerrero de todos y las mujeres Stark emprenden viajes separadas hacia un destino incierto.
Sin duda un episodio excelente, en el que casi todos los personajes tuvieron su momento para brillar y en el que no hubo que tolerar demasiado a los detestables Cersei y Jammie. Sin embargo Tyrion continúo dispensando su sabiduría mientras que Tywin reveló porque es el león Lannister. Cabe mencionar un honorable sacrificio de un personaje secundario, que murió, pero no será olvidado ya que sus lecciones vivirán en su última discípula.
Puntaje: 8/10- Otro gran capítulo para Game of Thrones que se prepara para el gran final de su primera temporada y también para despedirse hasta el año próximo.
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